OÍDO MEDIO
Está constituido por la membrana timpánica y la cadena de huesecillos (martillo, yunque y estribo).
La membrana timpánica está formada por tres láminas:
La más externa es una lámina epitelial estratificada (protectora), bajo la cual se dispone una lámina media fibrosa (elástica), que está recubierta por una lámina interna de una mucosa respiratoria que se continua por la trompa de Eustaquio. La comunicación a través de este conducto permite equilibrar las presiones del oído medio con el exterior a través de los conductos nasofaríngeos.
Sobre la membrana timpánica se apoya un hueso denominado martillo, que está a su vez en aposición con otro huesecillo llamado yunque, que a su vez se apoya sobre un tercer hueso, el estribo. El estribo reposa sobre la membrana oval dispuesta en la base de la cóclea.

El oído medio desempeña varios papeles

Por una parte, compensa la amortiguación del sonido debido a los cambios de impedancia (resistencia al paso del sonido) en la transmisión de la onda sonora del aire a un medio líquido. La impedancia para la transmisión de la onda sonora por un medio está directamente condicionada por la presión de sonido e inversamente por la velocidad del volumen de medio desplazado.
En un símil con la electricidad la impedancia sería la resistencia, la presión el voltaje y la velocidad la intensidad de corriente.
La impedancia del aire y de un medio acuoso es distinta produciéndose una amortiguación de la onda sonora en su desplazamiento en el medio acuoso (líquido en el interior de la cóclea) desde el aire (que llega a la membrana timpánica).
El 99% de la energía de una onda sonora que choca con medio acuoso rebota y sólo el 1% entra en el líquido, perdiéndose el equivalente a unos 30dB de intensidad. Esto es lo que se conoce como el problema del desemparejamiento de las impedancias.
Para compensar esta disminución existe un mecanismo asociado al oído medio en base a la relación entre el área timpánica y el área del estribo.
El área de la membrana timpánica es de 60mm 2 y la del estribo 3,2mm 2 ,por lo tanto la presión ejercida sobre la superficie timpánica se concentra sobre la mucho menor superficie del estribo, lo que supone una amplificación de unos 25 dB que compensan en parte las pérdidas en intensidad debida a la transmisión de la onda sonora desde el aire al medio líquido.
El efecto neto es el incremento de presión creado por el sonido sobre la membrana de la ventana oval para que el líquido dispuesto en la cóclea sea desplazado.
El oído medio también actúa como un sistema protector de ruidos, concretamente los músculos tensores timpánico (del martillos) y tensor del estapedio (estribo) cuando se contraen dan mayor rigidez a la cadena de huesecillos, lo que provoca una reducción en la eficiencia de transmisión del sonido.
Este sistema es más eficiente para amortiguar sonidos de bajas (menores a 1kHz) que de altas frecuencias. Se activa de manera refleja para sonidos de 60-80dB con una latencia de 10 milisegundos y por tanto, protege a la cóclea de daños contra sonidos de alta intensidad.
Además, este mecanismo se activa de forma preprogramada cuando hablamos (disminuyendo el impacto del retorno sonoro de nuestra propia voz) sobre el sistema auditivo.