MÉTODOS DE DATACIÓN RELATIVOS (CONTINUACIÓN)
Racemización de aminoácidos
Los aminoácidos (aa) son moléculas orgánicas formadas por un grupo amino (-NH2) y un grupo carboxílico (-COOH) y todos los tejidos biológicos los contienen. Su forma más habitual es en forma de cadenas, como parte de las proteínas. Sin embargo, como moléculas independientes los aminoácidos también cumplen importantes funciones en procesos biológicos. Todos los aminoácidos excepto la glycina (el más simple) pueden tener dos posibles configuraciones especulares o dos posibles esteroisómeros: la forma levógira (L) y la forma dextrógira (D).
En los organismos biológicos dominan las formas L ya que los aminoácidos que forman las proteínas sólo pueden tener esta configuración. Pero, una vez muertos, las moléculas cambian hacia formas D mediante un proceso denominado racemización. Así, la ratio entre las formas D y L cambia desde valores próximos 0 hacia valores próximos a 1 una vez que se alcanza el equilibro. De este modo, midiendo la relación entre formas D y L de un aminoácido y sabiendo la tasa de racemización puede estimarse cuánto tiempo hace que el espécimen ha muerto. A mayor ratio D/L mayor antigüedad. La medida de las formas isoméricas de un aminoácido puede realizarse mediante cromatografía de intercambio iónico y mediante cromatografía gas-líquido.
La tasa de racemización puede estar afectada por factores ambientales como la temperatura o el pH lo que puede ocasionar errores en la datación. Además, es necesario que el fósil constituya un sistema cerrado no sujeto a contaminación con aminoácidos "más recientes".
Así, a pesar de de que la racemización es un proceso que afecta a todos los organismos, en la práctica, los únicos materiales apropiados para la datación por racemización de aminoácidos son aquellos que están incluidos en una densa matriz carbonatada que tampona las variaciones en pH y proporciona un sistema cerrado que no se ve afectado por factores externos:
ej: moluscos con concha, huevos de aves, y materiales orgánicos incorporados en matrices geológicas carbonatadas.
Sin embargo, la dependencia de la tasa de racemización con la temperatura hará que un molusco que haya muerto durante el último interglacial haya experimentado significantes variaciones en su tasa de racemización a lo largo de los últimos 13000 años. Lo que implica que, si se quieren hacer comparaciones entre ratios D/L de especímenes de distintos sitios éstos tienen que haber experimentado condiciones climáticas similares, por lo menos en lo que respecta a la temperatura.